#UPNAResponde/#NUPekErantzun: ¿Respirar, usando el diafragma, aumenta las defensas?

Responde: Tomás Belzunegui Otano, vicedecano del Grado en Medicina de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Pública de Navarra (UPNA).

 

La respiración humana es el proceso por el cual, de forma activa,
introducimos aire atmosférico a nuestros pulmones para que se realice el
intercambio gaseoso (la sangre se libera del exceso de CO2 y se carga de
oxígeno).

Esta acción se realiza aumentando nuestra capacidad torácica a través de
la horizontalización de las costillas y a través de la contracción del
diafragma (la denominada respiración abdominal o diafragmática).

Algunas fuentes creen que “involucrar el diafragma hace que se masajeen
los órganos internos y las glándulas, lo que a su vez ayuda a mover la
linfa por todo el cuerpo a sus ubicaciones específicas” (1). O que la
respiración abdominal profunda y controlada también puede fortalecer las
defensas del cuerpo, al alterar la expresión de los genes relacionados con
el sistema inmunológico (2).

Yoga

En yoga, “Pranayama” significa control de la energía y su principio es que,
cuando respiramos, absorbemos por el aire el “Prana” o la energía del
universo, de forma que se entiende que controlar la energía es controlar la
respiración.

En la actualidad, no existen suficientes estudios contrastados con
metodología científica que correlacionen dichas técnicas con un aumento de
la inmunidad.

 

Notas:

1.-https://www.amazon.com/Healer-Within-Traditional-Techniques-Meditation/dp/0062514776
2.- http://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0062817

 

Nota: las personas interesadas podrán plantear a investigadores de la UPNA cuestiones relacionadas con el coronavirus o el estado de alarma a través del correo electrónico vicerrectorado.proyeccionuniversitaria@unavarra.es, incluyendo en el asunto #UPNAResponde/#NUPekErantzun. 

 

#UPNAResponde/#NUPekErantzun: ¿Cómo está respondiendo nuestro sistema sanitario? Innovación en atención sanitaria para hacer frente al coronavirus

Responde: Tomás Belzunegui Otano, vicedecano del Grado en Medicina de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Pública de Navarra (UPNA).

 

Personalmente, creo que el sistema sanitario de Navarra está respondiendo bien y, sobre todo, de forma muy ágil y coordinada al reto que supone la emergencia infecciosa del coronavirus en la Comunidad Foral.

Todos somos conscientes de que tenemos una red sanitaria pública muy robusta y una importante presencia privada y de que esta emergencia está poniendo a prueba nuestra capacidad de adaptarnos a una situación a la que nunca nos habíamos enfrentado y que tiene unas claves muy concretas: afecta a un gran número de personas que, en un porcentaje no despreciable, presentan un cuadro clínico respiratorio grave que precisa ingreso en Unidades de Cuidados Intensivos, ventilación mecánica y un tiempo de ingreso de entre tres y cuatro semanas

Desde el principio, el Departamento de Salud del Gobierno de Navarra asumió el mando de la crisis y tuvo claro que había que cambiar totalmente la organización. Atención Primaria suspendió toda la actividad programada y se convirtió en el primer escalón de cribado y valoración (fundamentalmente, telefónica) de todas las personas   que presentaban patología respiratoria, realizando un trabajo fundamental.

Urgencias de los Hospitales (que vieron bajar a menos de la mitad el volumen de pacientes diarios) se han convertido en los lugares donde se valoran los casos con dificultad respiratoria y se les realiza una RX (radiografía) para ver si existe neumonía.

El Hospital ha suspendido todas aquellas actividades “programadas” (fundamentalmente, quirúrgicas) que no son imprescindibles.  En ese sentido, se han garantizado una serie de servicios que no se pueden suspender, como los hospitales de día de oncología, diálisis, radioterapia, intervenciones quirúrgicas urgentes, banco de sangre, coordinación de trasplantes, etc… Esto ha permitido aumentar notablemente el número de camas en unidades específicas, evitando así el contacto de pacientes con COVID-19 con el resto de personas enfermas y permitiendo cuadruplicar el número de camas en cuidados intensivos.

SOS-Navarra 112 y la red de transporte sanitario también han necesitado cambiar totalmente su forma de funcionamiento. Por decirlo de una forma comprensible, nuestro sistema de emergencias está preparado para el día a día “habitual”: accidentes de tráfico, infartos, ictus etc…, lo que en atletismo sería una carrera de 100 metros y la pandemia de coronavirus es una maratón.

Sanitaria

Es cierto que el desarrollo de los acontecimientos nos permite algo de tiempo con el fin de  prepararnos para una realidad que consiste en muchos pacientes confinados en sus domicilios con miedo, muchos pacientes ingresados en las plantas de hospitalización y muchos pacientes que están muchos días en las unidades de cuidados intensivos.

Esta situación de emergencia ha propiciado, además, que se haya creado la figura de un coordinador con capacidad ejecutiva y de decisión organizativa sobre todos los hospitales de Navarra (públicos y privados). La capacidad de la red hospitalaria es de 1.500 camas, de las que podría dedicar hasta un 50% a la atención de pacientes con coronavirus. Por ese motivo y dado que la capacidad del sistema permite seguir atendiendo a los pacientes en entornos hospitalarios, no se plantean espacios en forma de hospitales de campaña como los montados en otras comunidades.

Por el momento, se descarta el uso de hoteles para acoger pacientes con poco soporte familiar, aunque se está valorando, en función de las necesidades, ponerlos a disposición de profesionales sanitarios que estén en contacto con afectados para que no tengan que volver a sus casas y evitar posibles casos de contagio.

En definitiva, una situación a la que nunca nos habíamos enfrentado, que ha requerido un cambio total en la organización sanitaria de Navarra para responder de forma óptima. La innovación más importante del sistema, por tanto, ha sido organizativa.

 

Nota: las personas interesadas podrán plantear a investigadores de la UPNA cuestiones relacionadas con el coronavirus o el estado de alarma a través del correo electrónico vicerrectorado.proyeccionuniversitaria@unavarra.es, incluyendo en el asunto #UPNAResponde/#NUPekErantzun. 

Una microcámara para explorar el tubo digestivo

La tecnología es una gran aliada en la labor de los médicos para contribuir a mejorar la salud de los pacientes. Un ejemplo es la cápsula endoscópica, una nueva tecnología utilizada para explorar el intestino delgado, un órgano móvil localizado en el interior de la cavidad abdominal. Presenta una longitud media de seis metros y está formado por el duodeno, el yeyuno y el íleon. Esto hace que su accesibilidad hasta la aparición de la cápsula endoscópica mediante las técnicas existentes (gastroscopia y colonoscopia) fuera limitado, pues sólo permitía explorar unos pocos centímetros del duodeno y del íleon terminal.

En 2001, con la aparición y posterior comercialización de esta nueva tecnología (la cápsula endoscópica), el abordaje endoscópico del intestino delgado dejó de ser una utopía, pues permite explorar de una forma fácil y sencilla la totalidad de este órgano (enteroscopia).

Esta nueva tecnología consta tres elementos fundamentales: la cápsula endoscópica, la grabadora y un software especial instalado en el ordenador. La cápsula endoscópica es ligeramente mayor que un comprimido (de entre 11 y 26 milímetros) y fácil de ingerir por vía oral. Se caracteriza por capturar de dos a seis imágenes por segundo desde su activación en la boca y mantiene su función hasta que alcanza el colon o se agota la batería, cuya duración alcanza entre diez y doce horas de media. Las imágenes obtenidas son trasmitidas por radiofrecuencia a la grabadora que porta el paciente para, posteriormente, ser descargadas y procesadas por un software especial en un ordenador hasta obtener el vídeo final.

Tal ha sido el impacto de esta técnica en la medicina moderna que, en la actualidad, más de tres millones de exploraciones con cápsula endoscópica se han realizado en todo el mundo y se ha visto un incremento en las indicaciones para su uso. Todo ello, en parte, se debe a la sencillez de la prueba y a la buena aceptación del público en general. De hecho, actualmente todas las guías clínicas consideran a la cápsula endoscópica como la primera exploración a realizar para estudiar el intestino delgado, relegando a la endoscopia convencional al estudio del esófago, estómago y colon.

La cápsula endoscópica es capaz de detectar lesiones extra-intestinales de una forma fácil y sencilla, según recogen un gran número de estudios. Algunos de estos hallazgos son de una relevancia extrema, al tratarse de lesiones desapercibidas con anterioridad por otros procedimientos. Si bien los hallazgos obtenidos son prometedores, hay que tomarlos con cautela, pues que aún no se ha demostrado que esta tecnología sea superior a la endoscopia convencional, sino que más bien se trata de un complemento de esta.

En conclusión, nos hallamos ante una nueva herramienta útil y complementaria a la endoscopia convencional, que permite explorar de forma no invasiva todo el tubo digestivo desde la boca hasta el ano (panendoscopia). A pesar de este horizonte tan prometedor, se debe ir aún con cautela dadas las limitaciones que estos dispositivos aún presentan y, muy probablemente, pronto se pulirán.

 

Esta entrada ha sido elaborada por José Francisco Juanmartiñena Fernández, médico adjunto del Servicio de Digestivo del Complejo Hospitalario de Navarra (CHN) y doctor por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) con una tesis doctoral sobre lesiones extra-intestinales detectadas con cápsula endoscópica